Batir huevos y azúcar a punto letra (10 min con batidora, hasta que triplique volumen).
Incorporar suavemente: miel, vainilla y harina (tamizada) con movimientos envolventes.
Hornear a 180°C por 15-20 min en molde enmantecado (pinchar con palillo: debe salir seco).
Enfriar y cortar en 2 capas horizontales.
Hidratar la gelatina: Disolver 10 g en 50 ml de agua caliente. Reservar.
Batir la crema a punto medio (que forme picos suaves).
Mezclar dulce de leche + leche hasta homogeneizar. Agregar la gelatina disuelta.
Incorporar la crema batida al dulce de leche en 2 partes, con movimientos suaves.
Primera capa: Colocar un disco de bizcochuelo en un molde desmontable.
Relleno: Verter la mitad de la crema de dulce de leche.
Segunda capa: Tapar con el otro disco de bizcochuelo.
Refrigerar 2 horas (hasta que la crema cuaje).
Cubrir con el resto de la crema (o solo en el centro, estilo naked cake).
Espolvorear chocolate rallado y nueces picadas por encima.
Enfriar 4 horas (o toda la noche) antes de servir.
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